Hace unos
años, a Manuel Bonastre se le ocurrió expresar en voz alta y en distintos
lugares, que había que construir un nuevo colegio para dejar libre el actual
del Compromiso.
Entonces
gobernaba en coalición con CHA y PSOE, lo más suave que se pudo oir: “está
loco”, y tal vez en ese momento tenía un puntito de locura, pero hay que
reconocer que visión de futuro no le faltó, y se pasaron unos años de gran
bonanza económica que tal vez, en vez de hacer tantas ampliaciones, que parece
ya nace pequeñas, hubiera sido conveniente escuchar a aquél concejal que veía
el Compromiso convertido de nuevo en el convento de los Sanjuanistas.
¡Qué locura,
decían algunos, el Colegio Compromiso, con la historia que tiene!, y seguían
pensando que era una locura.
No se que pensará
hoy, cuando se clama por un nuevo colegio, en las inmediaciones del actual
Alejo Lorén, de los pabellones, piscinas e instituto. Aquella locura, o se ha
contagiado, o Manuel Bonastre se adelantó a los planes de otros para marcarse
un tanto en su casilla.
El caso es que
hoy todos suspiran por un nuevo centro.
La otra parte,
era la pretensión de reconstruir el convento y volver a darle al conjunto
medieval el esplendor que tuvo en el Siglo XV.
En estos
momentos, no digamos que Bonastre está loco porque puede, a alguien ocurrírsele la idea y todos a
aplaudir con las orejas, como otras tantas veces.
Sr Bonastre,
que no se puede ir por delante de los que deben tener las ideas, espero que lo
haya comprendido.
¿Un convento
sanjuanista, un castillo con su torre del homenaje, una colegiata rehabilitada,
unas bodegas, unos jardines, una reconstrucción de la acrópolis del Siglo XV?.
¡No está mal!,
recupere el proyecto, no sea que alguien se lo pise.